Irán sigue poco a poco, despacito, avanzando en sus intentos de convertirse en la primera potencia espacial de Oriente Medio. Sí, ya sé que hace tiempo que tenemos por ahí a Israel, que con su lanzador Shavit derivado del misil Jericó II ha lanzado algún que otro satélite espía al espacio… Pero si Israel participa en Eurovisión será que es un país europeo, ¿no?, así que en ese caso, Irán se convertirá en la primera potencia espacial de la región… [/mode ironic off]
Bueno, dejándonos de tonterías, la razón de esta entrada es que Irán ha anunciado recientemente su intención de lanzar animales al espacio, en vuelos suborbitales. En paralelo, continúan perfeccionando el lanzador Safir, con el objetivo de lanzar al espacio su primer satélite de fabricación nacional, Omid, una vez se hayan llevado a cabo con éxito un par de vuelos de prueba con el mencionado cohete. Esto parece corroborar que, en efecto, el anterior vuelo del Safir en agosto de 2008 fue un fracaso, aconsejando un mayor conservadurismo de cara al próximo intento orbital.
Pero lo más sorprendente para mi ha sido el anuncio de iniciar vuelos espaciales con animales. Sorprendente porque hoy en día es algo que no tiene mucho sentido, especialmente tratándose de vuelos suborbitales como estos, simples “saltos” hacia lo alto con una breve incursión de unos pocos minutos en el espacio exterior, más allá de la atmósfera terrestre (un hecho éste, el de la trayectoria suborbital, que apenas se menciona en el anuncio, en un claro intento de no restar importancia a la misión). En los comienzos de la era espacial, estos vuelos eran necesarios para asegurar la inocuidad de los viajes espaciales de cara a las primeras misiones tripuladas, pero en la actualidad una misión como ésta no aporta nada nuevo. Nada, excepto publicidad.
escribirY es que para mi parece claro que esto es lo perseguido con el anuncio. Estas misiones con animales se presentan como un primer paso hacia futuras misiones espaciales tripuladas por parte de Irán, pero esto es, a día de hoy, pura ciencia-ficción. Cuando ni tan siquiera se ha perfeccionado un cohete ligero capaz de lanzar un pequeño satélite al espacio, hablar de misiones tripuladas parece pura palabrería. A no ser, claro, que se limiten también a saltos suborbitales a bordo de una pequeña cápsula, algo que podría alcanzarse en fecha más próxima aunque no antes de unos cuantos años más (si es que de verdad se persigue). Pero es que aunque fuera ése uno de los objetivos del programa espacial iraní, lanzar un persa al espacio, estos lanzamientos con animales no aportarían nada.
Por todo ello, creo que el anuncio parece reflejar el espíritu del naciente programa espacial iraní: más que avances tecnológicos reales, parece buscarse la espectacularidad, el prestigio frente a sus vecinos. Aunque sea simplemente a base de lanzar a un pobre bicho hacia lo alto para recogerlo después en paracaídas (sobre la especie del pobre bicho no sabemos nada). En fin, siempre será mejor usar los misiles para eso que equiparlos con cargas bélicas…
Bueno, dejándonos de tonterías, la razón de esta entrada es que Irán ha anunciado recientemente su intención de lanzar animales al espacio, en vuelos suborbitales. En paralelo, continúan perfeccionando el lanzador Safir, con el objetivo de lanzar al espacio su primer satélite de fabricación nacional, Omid, una vez se hayan llevado a cabo con éxito un par de vuelos de prueba con el mencionado cohete. Esto parece corroborar que, en efecto, el anterior vuelo del Safir en agosto de 2008 fue un fracaso, aconsejando un mayor conservadurismo de cara al próximo intento orbital.
Pero lo más sorprendente para mi ha sido el anuncio de iniciar vuelos espaciales con animales. Sorprendente porque hoy en día es algo que no tiene mucho sentido, especialmente tratándose de vuelos suborbitales como estos, simples “saltos” hacia lo alto con una breve incursión de unos pocos minutos en el espacio exterior, más allá de la atmósfera terrestre (un hecho éste, el de la trayectoria suborbital, que apenas se menciona en el anuncio, en un claro intento de no restar importancia a la misión). En los comienzos de la era espacial, estos vuelos eran necesarios para asegurar la inocuidad de los viajes espaciales de cara a las primeras misiones tripuladas, pero en la actualidad una misión como ésta no aporta nada nuevo. Nada, excepto publicidad.
escribirY es que para mi parece claro que esto es lo perseguido con el anuncio. Estas misiones con animales se presentan como un primer paso hacia futuras misiones espaciales tripuladas por parte de Irán, pero esto es, a día de hoy, pura ciencia-ficción. Cuando ni tan siquiera se ha perfeccionado un cohete ligero capaz de lanzar un pequeño satélite al espacio, hablar de misiones tripuladas parece pura palabrería. A no ser, claro, que se limiten también a saltos suborbitales a bordo de una pequeña cápsula, algo que podría alcanzarse en fecha más próxima aunque no antes de unos cuantos años más (si es que de verdad se persigue). Pero es que aunque fuera ése uno de los objetivos del programa espacial iraní, lanzar un persa al espacio, estos lanzamientos con animales no aportarían nada.
Por todo ello, creo que el anuncio parece reflejar el espíritu del naciente programa espacial iraní: más que avances tecnológicos reales, parece buscarse la espectacularidad, el prestigio frente a sus vecinos. Aunque sea simplemente a base de lanzar a un pobre bicho hacia lo alto para recogerlo después en paracaídas (sobre la especie del pobre bicho no sabemos nada). En fin, siempre será mejor usar los misiles para eso que equiparlos con cargas bélicas…
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